CONSUMER PRICE INDEX (CPI)
El Consumer Price Index (CPI) o el Índice de Precios al
Consumidor (IPC) es una medida del cambio en los precios pagados por los
consumidores por una cesta de mercado de bienes y servicios de consumo en el
mediano y largo plazo.
Su importancia ha aumentado desde las iniciativas de gasto
billones de dólares del Gobierno destinados a contrarrestar los efectos de la
pandemia.
El informe del CPI de
2022 subió y ha sido el más alto en 42
años. Esto aumentó el interés en este indicador macroeconómico.
En términos generales, el CPI mide el precio de los bienes
de consumo y su tendencia. Es una herramienta para medir cómo le va a la
economía en su conjunto cuando se trata de inflación o deflación. Al planificar
cómo gasta o ahorra dinero, el IPC puede influir en las decisiones pues al
tener un impacto tan alto en la canasta de bienes y servicios la Reserva
Federal como parte de sus funciones tiene la obligación de garantizar el
fortalecimiento del mercado laboral pero también el control de precios.
Para esto se ha dispuesto el movimiento artificial de las
tasas de interés interbancarias que repercute en las tasas de interés del
público en general ya que el acceso al dinero se vuelve más costoso para las
entidades bancarias y a su vez se transfiere este costo a los consumidores de
crédito.
El efecto es desincentivar el consumo y equilibrar la
balanza de la oferta y la demanda de productos logrando aligerar la expansión
de los precios a través del aumento de la oferta y disminución de la demanda
general de bienes y servicios.